La Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) recomienda no ingerir más de 25 g, diarios de azúcar por persona y día, lo que equivale a unos 6 terrones.
Ademas advierte que:
«Gran parte» de los azúcares que se consumen actualmente están «escondidos» en alimentos elaborados que generalmente no se consideran dulces. Por ejemplo, una cucharada de ‘ketchup’ contiene unos cuatro gramos de azúcar, y una sola lata de refresco endulzado con azúcar contiene hasta 40 gramos
La semana pasada, viendo el programa, “EL COMIDISTA”, en unos de sus reportajes, analizaban la cantidad de azúcar que sin darnos cuenta podemos llevar en nuestro carro de la compra habitual.
Me pareció tan gráfico, que creo que merece la pena que lo veáis, podéis hacerlo a través del siguiente enlace. -> Ver el video
El azúcar está presente en los productos más insospechados… ¿Quién la esperaría en unas costillas a la barbacoa? ¿y en una hamburguesa? ¿El aquarius tiene tanto azúcar como la Coca-Cola?
Veamos cuánto azúcar lleva una selección de productos, visto en terrones de azúcar. Recordemos que la recomendación diaria en total son 6 terrones.
Estan sacadas de la página «sin azucar.org» donde también me parece interesante que entréis para más información.
INFANTIL
REFRESCOS
GALLETAS
SALADOS
VENDING
OTROS
¿Pero hay manera de evitar el consumo excesivo de azúcar?
En la alimentación infantil, hay cantidad de chucherías disfrazadas de alimentos (batidos, zumos de frutas, frutas con yogur…) Hay tanta cantidad, que es imposible nombrarlos todos, y su consumo es tan habitual y ordinario que prácticamente todos los niños que entran por mi puerta llevan alguna chuche.
Lo malo es que la mayoria de las veces, las están tomando sustituyendo una comida, desayuno, almuerzo…
Parece que los padres siguen pensando que un zumo de caja o un envase con una etiqueta que dice que contiene fruta equivale a una pieza de fruta… y en ningún caso y con ningún producto que yo conozca, es así.
Una de las pediatras de mi centro lo explica muy bien:
«Cualquier producto que compres elaborado, piensa que lo preparan, para que a tu paladar le resulte agradable y sólo hay dos formas de hacerlo. Añadir azúcar o añadir grasas.»
Asi que, el primer paso será evitar los productos elaborados… Por desgracia no conozco ninguno que se salve…
Supongo que estaréis pensando…»¿Ya, y como consigo que coman comida sana?
Pues ese será el segundo paso, conseguir que estos productos naturales no resulten aburridos y los niños los reciban bien…
Se puede conseguir…
Trasformar la fruta en un plato divertido es posible. Estamos de vacaciones y diponemos de más tiempo.
Meternos en la cocina con los pequeños y preparar cosas divertidas con la comida natural, puede ser una gran inversión en salud. Y una vez que acepten los alimentos naturales, es más dificil que los cambien por comida basura.
Tenemos muchísimos ejemplos más en internet que os pueden resultar divertidos para compartir con vuestros hijos.
Los hábitos en alimentación, como cualquier otro hábito se forma en la infancia.
Cuando viajamos y probamos comidas de alguna cultura diferente nos resultan extrañas y a veces nos preguntamos, cómo les pueden gustar esos platos. La respuesta es muy sencilla, porque lo están comiendo desde niños.
Lo mismo les pasará a nuestros pequeños si les damos alimentos dulces, salados o ricos en grasa. Poco importa que ponga en la etiqueta que no se los hayan añadido, estaremos acostumbrando su paladar a estos sabores.
Pensemos en nosotros como adultos.¿No sería estupendo que nuestros sabores favoritos fueran los de la comida saludable? Que los pasteles nos resultaran muy empalagosos, y sólo pudiéramos comer un trocito. Que sólo añadiéramos un poco de sal, porque enseguida nos resultara fuerte. O que si comiéramos algo con mucha grasa, nos resultara muy pesado..
¿No nos gustaría que eso mismo les pasará a nuestros hijos?
Podemos estar a tiempo para que nuestros hijos coman de forma saludable, pero porque su paladar lo prefiera.
Un ejemplo que me llama mucho la atención. Cuando los niños pasan de tomar el pecho de mamá a la leche de vaca, ¿por qué hay que añadirle Colacao?
La leche de mamá no ha llevado ningun aditivo y le ha encantado hasta ahora… ¿no?